"Mi estancia en el ITAM inició hace dos años y, sinceramente, jamás pensé poder asistir a este Instituto de tan alta calidad educativa, ya que no está al alcance de mi familia pagar las colegiaturas. Afortunadamente, el ITAM apoya a estudiantes que tienen ganas de salir adelante y de estudiar en esta universidad, pero que no tienen la solvencia económica para poder realizarlo. Así es como pude ingresar a realizar mis estudios de licenciatura y actualmente estudio el quinto semestre de la licenciatura en actuaría.
La verdad es que ha sido una experiencia única. Si bien es cierto que el ITAM te pide un alto grado de compromiso y de rendimiento, tiene su recompensa. En el tiempo que llevo estudiando he tenido un aprendizaje sin igual, porque no sólo me ha enriquecido en conocimientos concretos de mi carrera, que desde luego son de excelente calidad, sino también, me ha dado herramientas para poder definir mis ideas y mi carácter.
Los dos primeros semestres fueron un tanto difíciles porque vivo bastante retirado de la escuela, por lo cual gasto mucho en pasajes y en alimentos ya que tengo que comer fuera de casa, y esto nos generaba a mi familia y a mí una preocupación, y además me provocaba una distracción de mis estudios. Sin embargo, en el tercer semestre de mis estudios, la Beca Rurik Magos Acosta, con la cual estoy muy agradecido, me brindó la oportunidad de liberarme de esa preocupación con una beca de manutención, que tuvo como consecuencia que ahora tenga un mayor rendimiento y que pueda seguir en el ITAM. Realmente he sido muy afortunado por las oportunidades que la familia Rurik Magos Acosta y los donantes que aportan a esta beca me han dado, que son poder estudiar una carrera que me apasiona, de ser itamita y poder complementar mi desarrollo como persona; en verdad se los agradezco."